Desde el
Paraguay, En el corazón de la cordillera, testigo Soy y testimonio doy, desde
lo más hondo de mi corazón y conectada a mi Ser, que reverencia a Tu Ser – Elieser.
En nuestro
recuerdo, no muy lejano en el pasado, pero presente y vivo en nuestro corazón,
bajo el frondoso árbol... dónde hoy nos orienta una estrella con los puntos
cardinales, sentados disfrutamos del privilegio de tenerlo en nuestra casa, que
siempre fue y es tu casa.
Quedó
registrado en el éter el mensaje que a través de ti nos fue manifestado, y que
hoy, sin titubeos es una realidad.
Tal como un
día nos anunciaste, han transitado y transitarán sin dudas, hermanos de todo el
mundo como: Rusia, EEUU, Francia, Inglaterra, Italia, Alemania, Checoslovaquia,
Brasil, Argentina, Uruguay, Perú, Ecuador, México, y otros, tal como tú nos
predijiste aquel día.
El lugar se
ha convertido en un jardín, en donde las personas que vienen, sienten, se
alimentan y vigorizan su espíritu con la energía que irradia.
Es como un
oasis de Paz, para todo aquel viajero que busca saciar su sed y reverberar la
esperanza, logrando la fortaleza necesaria para su reencuentro con el ser
Crístico que todos portamos.
Eternamente
gracias hermano, por haber sido el canal sembrador de las semillas del Orden,
el Amor y la Luz, en beneficio de los que hoy visitan el lugar, y en beneficio
nuestro.
Que nuestro
Amado Padre los cuide, los Bendiga y los proteja, proveyéndoles siempre de todo
el Suministro Divino necesario para el Cumplimiento y la concreción del Divino
Plan en la Real – Ización del Planeta Tierra, en la Santa Estrella de la
Libertad.
Gracias!
Arturo Y Olga